sábado, 1 de septiembre de 2012

Sonrisas rotas.

"Ríe ante los problemas." te dijeron.
Y eso hiciste.
Empezaste con una débil sonrisa,
se ensanchó,
se convirtió en una carcajada.

Y, entonces, empezaste a llorar.
Ya no se pudo distinguir
entre sollozo y carcajada.
No se sabía dónde estaba el inicio
y el final de cada una.
¿Acaso son diferenciables? Sólo son las dos caras de la misma moneda, dulzura. 

1 comentario:

  1. Recuerdo una vez en la que reí llorando. Pero en ese caso era un llanto de felicidad.
    Estaba hablando con mi mejor amiga por chat, hace un par de años, y en esa época ni ella era tan afectiva ni nos veíamos mucho. Pero recuerdo que ella había comenzado a hablar de lo mucho que me apreciaba, y me emocioné. Pero estaba felíz, entonces seguía sonriendo.
    Siempre voy a recordar que ella, esa vez, cuando le dije me escribió : "¿Y qué es más hermoso que la lluvia en un día soleado?".

    Cómo me sacás la parte profunda con tus entradas, eh xD.

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