martes, 12 de marzo de 2013

Fuego.

El poder destructor contemplaba
de Guerra, un ente descontrolado.
Solo ruinas y terror sembraba,
abre los ojos, en ambos lados.

Se duerme con el toque de queda,
primera explosión despertante,
se refugian en la arboleda.
Es miedo y miseria latente.

¿Realmente existe la feliz paz,
la conocerá la terrenal faz?
¿O serán como un animal rapaz?

¿Sacumbir a la debilidad,
o seguir combatiendo sin final?
Es el eterno dilema letal.

1 comentario:

  1. Creo que va a gustarme más tu poesía que los otros textos. Desconozco l motivo por el cual mi móvil considera oportuno no dejarme poner comas a todo esto.

    El caso es que el título me ha llamado bastante la atenión ya que siempre sentí cierta fascinación por eL fuego.

    Sin embargo creo que tienes cierta fijación por la destrucción ehhh? Que conste jajaja.

    Name.

    ResponderEliminar

Los comentarios suelen ayudar a crecer, sobre todo, si indican qué se debe mejorar o los posibles puntos flacos. Gracias.